Aun no son ni las 5 am
entre tanto se escuchan
ya cantar entre el cristal
de mis ventanas las tortolitas,
los sastrecillos y los
gorriones, están alegres
por el nuevo alba y
contagian de misterio
por ver el nuevo dia discurrir.
A la misma hora
dia tras dia
escucho sus silbidos
recalcar, apresurandose
notas graves y agudas,
mezcladas en el toque
leve de la obscuridad
que apenas sobra.
Mientras clarea
los hombres y mujeres
se incorporan de sus camas
a llevar a cabo
entre el buen y el mal humor
las actividades por obligación.
Comentarios
Publicar un comentario